Me pirra!!

El té.
Es una bebida que me encanta. Por su gran variedad, su sabor, sus propiedades. En invierno bien calentito, en verano bien frío.
Sea cuando sea y como sea siempre me reconforta.

Y este post se lo dedicó a esta "bebida mágica" porque una vez más me siento mejor gracias a ella.
Esta mañana me he levantado hecha polvo. Entre malos sueños, que he dormido encogida porque ya hace fresquito y no tomé suficientes precauciones, y que mi cuerpo está un poco traslocado no sé debido a qué, al abrir los ojos sólo quería que fueran otra vez las 00 de la noche para recuperarme y descansar tranquilamente.
Pero claro, aún no tengo el poder de manejar el tiempo a mi antojo.
El caso es que he empezado el día con una ducha caliente, que algo ha ayudado, pero nada.
Así que he optado por salir y dar un paseo. Al volver estaba peor.
Y tras dar un par de vueltas por la cocina he encontrado lo que buscaba. Al abrir un armario para guardar no sé qué cosa, me ha envuelto una mezcla de aromas que me ha hecho entender qué necesitaba. Un té.
Miles de sabores. Miles de olores. Un montón de sensaciones que me han hecho sentirme mejor. Así que he puesto agua a calentar para preparar esta bebida que me reconstituye al instante. He elegido uno que me regaló una amiga: té negro con manzana dulce.
Acabo de terminar una taza. Creo que iré a por otra. Me encanta.
Quieres una?