jueves, 11 de diciembre de 2008

Tiempo

En un intento de celebración por todo, el fin de semana pasado tuve de todo en mi vida. Fiesta por la noche, campo por el día, comida con amigos, alegria, diversión, un día en cama para recuperarme y un resfriado que me ha cogido y no me suelta.
Resulta tragicómico pensar que he estado un montón de tiempo sin trabajar y cuando veo que la vida laboral vuelve a mi camino, quiero hacer muchas cosas antes de quedarme sin tiempo.
Qué cosas más curiosas pasan en mi cabeza. Tengo una percepción de la realidad muy rara, "made in Lola" que a veces me gusta y a veces me agobia sin que halla razón alguna para ello.
Pero he decidido que voy a tomarme esta etapa de mi vida sin agobios. He entrado en un trabajo bastante ajetreado y lo mejor es tomárselo con tranquilidad porque sinó el oleaje te puede arrastrar muy fácilmente. Así que si veis que no escribo, o que escribo muy ajetreada, me dais un toque y me haceis volver a la realidad, ok?

Pero vamos, que este post ha empezado porque salí el viernes por la noche y me pasé todo el sábado echa unos zorros de la cama al sofá... y es que una ya va teniendo una edad aunque no la aparente...

Y eso, que a estar más relajaditos que sólo tenemos una vida.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me pasa algo parecido. mpiezo a trabajar el lunes tras un año en paro, y me entra una especie de intranquilidad porque se me curren un montón de cosas que debería hacer antes de que llegue ese día.

Pero también yo procuraré tomármelo con calma.

Besos!

pequeño saltamontes dijo...

Lo malo es cuando hay cambios bruscos en la rutina diaria. En mi caso siempre intento abarcarlo todo de golpe, y después acabo cayendo en picado, cansada, estresada y deprimida...
Como dice Pampanitos Verdes, ¡a tomárselo con calma! :) Y disfruta sobre todo de tu gente.

Un besote!

lola dijo...

Ánimo, que lo vas a hacer muy bien, aprovecho ya para desearte unas felices fiestas y un buen año 2009.
Saludos!