Con paciencia y tranquilidad, como el niño que intenta sacarse una espina superficial
con el miedo que supone no saber cómo saldrá la historia
y con la certeza de encontrarse sólo en estos momentos.
Con la incertidumbre de la duda y la certidumbre de que algo vendrá
sin saber lo que será, sin saber si todo será bueno.
Momentos raros, intensos y de lucha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario