lunes, 28 de julio de 2008
De cine
Y es hoy estoy un tanto perpleja.
Esta mañana, mientras me secaba y me iba vistiendo tras la ducha y anterior esfuerzo físico en el gimnasio, he alucinado. Me he sentido aspirada al interior de una película, en la que he pasado a tener un papel secundario, de relleno, vamos.
Lo dicho, llego yo de la ducha envuelta en mi toalla y abro mi taquilla. A dos taquillas de la mia hay una señora que se está (des)vistiendo? para ir a ¿la ducha? ¿alguna clase?. Está hablando por teléfono. Su hija tiene a su vez una hija y ésta ha debido pasar una mala noche a causa de alguna vacuna. Mientras la abuela (señora que se (des)viste le pregunta a su hija si tiene una cartulina con las vacunas que lleva, que se llevará el termómetro, que eso es normal y bla bla bla... Sin dejar la conversación ni por supuesto el teléfono, se quita el pantalón, se para, se quita los zapatos, se para (blablablablaaa), se quita la camiseta, blablabla... se quita las bragas, blablablaaa... y de repente en sujetador comienza a dar vueltas por el vestuario sin parar de hablar...
Surrealista.
Y digo yo que si no puede comenzar a (des)vestirse cuando ha acabado la conversación.
Es que las prisas son muy malas.
Al final ha quedado en pasarse por casa de su hija y luego ir a ver a una vecina... pero qué cotilla soy y qué silencioso estaba el resto del vestuario!
Y luego otra más. Que hoy voy por capítulos. Y de paso me estoy dando cuenta de que escucho lo que habla la gente así sin ton ni son... Pero es que hay gente que habla muy pero que muy alto...
En el dentista.
Espero mi turno leyendo mi correspondiente revista del corazón. Suelo ponerme al día de la vida de los famosos en el dentista y en la pelu, como aprovecho el tiempoo... ;-)
Una señora de aproximadamente 65 años espera que la llamen para la revisión leyendo el último libro de Carlos Ruiz Zafón.
-Teresa
-Si- dice la señora
-Ya puede pasar.
Y la señora pasa a un despachito, del cual NO cierran la puerta.
-¿Qué venía a hacerse?
-Pues que se me ha roto el diente comiendo un bocadillo! ayer! ya hacía tiempo que quería venir, pero entre unas cosas y otras...
-Y qué tal está?-
En esta clase de preguntas, y por la familiaridad del trato, me doy cuenta de que no es una paciente nueva...
-Pues mira hija, fatal...- a lo que a la señora se le traba la voz y comienza a llorar.
La puerta NO se cierra en ningún momento, y la sala de espera está allí mismo, donde estoy yo y dos personas más.
La señora empieza a contarle a la doctora que su marido, recién jubilado, la ha dejado y se ha ido con otra mujer. Que le ha AGUANTADO TODA LA VIDA para que ahora, que podían disfrutar los dos jubilados, se haya ido de una semana para otra. Sin ninguna explicación. Sólo le dijo que se iba con otra mujer. La señora sigue llorando.
-Al menos yo tengo mi pensión y a él que le den dos duros, ahora vivo más tranquila- la señora ya más relajada... le sigue contando a la doctora más detalles del proceso. Y de repente:
-Bueno, y a parte de lo del diente, que me hago ya la revisión y la limpieza anual-
-Bien- contesta la doctora que no había abierto el pico en todo el soliloquio de la señora... -Ahora pasa a la cabina y le hacemos la revisión.
Como si allí no hubiera pasado nada.
La señora sale del despacho con un pañuelo en la mano, coge de nuevo su libro y sigue leyendo.
-Lola-
-Si-
-Sube, que ya está todo preparado.
No puedo dejar de darme la vuelta para mirar a la señora. Y ella está allí, tranquila, esperando su turno. Como si nadie nos hubiéramos enterado de lo perra que puede llegar a ser la vida y de lo jodido que estar con una persona AGUANTANDO año tras año. Para qué?
Ahora imagino a esta señora queriendo hacer su vida sin pareja, con sus amigas, disfrutando,... y le deseo mucha suerte.
A que ha sido una mañana de película?? no sé si de Woody Allen o de Almodovar, pero vamos,... vaya mañana.
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9 comentarios:
La primera película es de las que a mí me gustan, las comedias; te hacen reír y cuando todo acaba te deja buen sabor de boca. Pero la segunda... ¡qué triste y amarga!
Yo también le deseo a la señora que encuentre un buen noviete que le quiera en poco tiempo el doble o triple de lo que la ha querido el otro en toda su vida.
¿Te has hecho un corte nuevo de pelo?
Petonets, Lola!
Corte de pelo? lo dices por lo de las revistas y la pelu, no?? Noo... es que las revistas estaban en el dentista, jaja!
Lo que me he hecho ha sido una reconstrucción molar, jaja!!!
Un beso guapa!
Jajaja,esto va a ser cosa del efecto invernadero o algo.Las señoras maduras que describes están totalmente fuera de sí.La primera debe tener querencia por el exhibicionismo;y la segunda,debe tener un problemon de autoestima más grande que el Coloso en llamas.
De película,pero encima taquillera!!!
Besazos.
¡Hala! Anda que ayer debía estar yo muy fina con lo del corte de pelo jajajaja.
Petonets
En el primer caso supongo, quiero pensanso así, que la señora no se dio cuenta de lo que hacía, ensimismada como estaba con el dichoso móvil. En el segundo caso, creo que la doctora debió de cerrar la puerta, ya que la señora no lo había hecho, considero que la pobre señora estaba pasando un mal momento, tengo una amiga a la que le ha sucedido algo parecido y
te digo que después de 35 años de matrimonio es un golpe bien duro, duro la suerte es que mi amiga aún trabaja y lo está llevando bastante bien.
Un saludo,
Un saludo,
pensarlo quise decir
joer, menuda mañanita, reina. jajajaja. me ha encantado la conversación en el dentista!!! bicos!
Chiquilla, que tengas unas felices vacaciones. Ese blog, he entrado algunas veces, es muy interesante. Un besote, y cuidate. ;)
Buaaaa yo alucino primero con tu memoria, después con tu oido, y para acabar con tu paciencia!!!!menudos dramas tiene la gente no????
Pero vamos que me he reido mucho leyéndolo, así que gracias!!!!!pasaré más amenudo por aquí.
Saludos!
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